1/12/08

Sedición.

Divagar entre el futuro,
tornar de nuevo al pasado
a ras de sueños y recuerdos
y brumar las cortas horas
en los brazos de lo vedado.
Unir con hilos de humo
la verdad de las palabras
que si acaso no bastan,
las miradas lo harán.
Relajarse con la tensión
que nos brinda lo prohibido,
en el cuarto menguante,
del cual las duras penas
suelen ser el tema preferido.
Construir una mejor vida
en la próxima ventura,
recoger grandes experiencias
y compartir arduas dudas.
Y aún en el subsuelo
se niega la intimidad
a prestarnos su presencia
si llega la enemistad.
Pero de nuestra alacena
todo en mi memoria quedará;
su turbia luz de lluvia,
su sincero aire de amistad,
el fuerte ardor de garganta
e incontables sensaciones
imposibles de expresar.

Autor: Daniel Rguez.