1/2/12

Arbitrario.

Me resulta imposible verte desde fuera,
compensado con el tiempo que me distes,
lo que me sobran son tus quimeras.
Ahora creo verte hundir tu historia en decadencia.
Calmado de la sed de verte asfixiarte,
desperté hace tanto…
que no recuerdo el día en que te soñé.
Seguro de haberte olvidado,
no te observo, pero cuando te miro,
te veo sin pena ni gloria,
como al tendero que vende frutas que no me apetecen,
como al desconocido que tampoco me quiere.
Ayer, que creí que te querría en derrota,
me equivoqué al pensar que te querría
y como no te deseo en forma alguna,
ni te invoco desgracias, ni te rezo fortunas,
me sorprendo indiferente sin saberte
de éste hombre, mujer devota.

No hay comentarios: